La paciencia se considera un rasgo de los más positivos y valiosos en una persona, pero en nuestro mundo moderno y acelerado, donde las cosas se hacen de una forma cada vez más rápida, a menudo nos perdemos lo que realmente importa. Necesitamos entender que llegar a cosas buenas lleva tiempo, que lograr cualquier objetivo implica un proceso.
Las artes marciales enseñan a los practicantes el valor de la paciencia, que es especialmente importante en el desarrollo de nuestros hijos. Al asimilar el valor de la paciencia a una edad temprana, comprenderán mejor cómo actuar con las metas que se esfuerzan por lograr.
La paciencia es una de las herramientas más importantes para lidiar con la frustración. Las personas que son pacientes están más sanas, física y mentalmente. Con paciencia, los niños pueden tomar mejores decisiones.
Es importante enseñar a nuestros hijos a ser pacientes, y el aprendizaje de las artes marciales cultiva este rasgo de diversas formas:
¿Qué aprenden los niños en las artes marciales?
1. Aprenden a lidiar con problemas de manera sistemática.
Las artes marciales tratan de lidiar con problemas y obstáculos de manera sistemática. La comprensión de las artes marciales implica una forma de pensar que permite el cultivo de grandes habilidades para la resolución de problemas, especialmente en los niños que necesitan desarrollar esta habilidad específica.
En muchas artes marciales, por ejemplo, el jiu jitsu brasileño, el judo o el kung fu , cada obstáculo se presenta con diferentes opciones de afrontamiento. Los niños practicantes pueden elegir una de las muchas y variadas formas que ofrecen distintos resultados.
Así es como los niños aprenden los resultados de sus acciones basándose en técnicas calculadas y pensamientos. Les enseña paciencia para determinar la mejor manera de lograr el resultado deseado.
Al aprender cómo cada acción tiene una causa y un efecto, los niños aprenden que incluso cuando es necesario tomar decisiones rápidas, a elegir con un enfoque más sabio.
2. Aprenden a confiar en el proceso.
Una de las lecciones importantes que las artes marciales les enseñan a los niños sobre la paciencia es que todo involucra un cierto proceso. Si bien el objetivo final y el resultado son importantes, los niños aprenden a comprender que deben confiar en el proceso y fluir con él para alcanzar el objetivo.
A menudo nos esforzamos por lograr los resultados que queremos y perdemos contacto con el proceso en el camino.
Las artes marciales nos enseñan que el proceso es tan importante como el resultado, y solo necesitamos hacer las acciones y asegurarnos de lograr nuestros objetivos gracias a realizar un trabajo adecuado.
Al aprender a confiar en el proceso, los niños se empoderan y aprenden que todo el trabajo duro que hacen, ya sea en casa, en el gimnasio o en la escuela, no desaparece sino que se acumula. Confían en el proceso y logran los resultados deseados.
3. Entienden el valor de invertir
La inversión de tiempo y esfuerzo y la perseverancia son la base de cualquier éxito. A través del entrenamiento en artes marciales, los niños aprenden que pueden lograr cualquier cosa si invierten suficiente tiempo y esfuerzo en ello. Las artes marciales también les muestran que todo es posible si se les da el esfuerzo necesario para tener éxito.
Cada encuentro de artes marciales es un desafío y, a menudo, tienes que trabajar duro para mejorar. No hay atajos para un aprendizaje adecuado y, en las artes marciales, los niños comprenden lo que deben hacer para alcanzar sus metas.